La Asociación de Periodistas de El Salvador, APES, sigue sin pronunciar una sola palabra en relación a los delitos sexuales presuntamente cometidos en perjuicio de una periodista de El Faro, por parte de colegas de ese medio de comunicación.

Carlos Martínez y José Luis Sanz son los nombres de los sujetos ligados a los crímenes de abusos sexuales y uso de drogas. Según La Página, los deliots van desde tocamientos, bromas excesivas, hasta forzamientos.

Pese a ello, la asociación ha preferido no denunciar estos crímenes y sigue sin establecer una posición al respecto.

Este silencio de APES es interpretado por diferentes sectores como una muestra de complicidad y nula voluntad de velar por la integridad física y moral de los periodistas.