La actividad económica en 2020 cerró con una variación de -7.9 % en comparación de 2019, una contracción menos profunda de la prevista, según los resultados actualizados del Banco Central de Reserva (BCR).
Hacia la mitad del 2020, el BCR estimaba que la economía dejaría de producir un 8.5 % menos que el año anterior.
De esta manera, la información actualizada quedó dentro de los tres posibles escenarios que había formulado el BCR, inclinado hacia un resultado más moderado.
La organización de ultraderecha, FUSADES, calculaba que la reducción del Producto Interno Bruto (PIB) llegaría a un 8.8 %, sin embargo, quedó en una proyección sin sustento.
Según el informe del Banco Central, los efectos de la pandemia provocaron que sectores que más dinamizan la economía, como las exportaciones y el consumo privado (de los hogares, principalmente) no pudieran hacer el mismo aporte.
La reapertura de la economía que ocurrió a partir de junio, impulsada por un fuerte respaldo del Gobierno a través de una política contracíclica, permitió al país iniciar una ruta de recuperación estable.
Por ejemplo, en el tercer trimestre de 2020, el consumo de hogares aumentó 18.6 % en comparación con el período de abril a junio. Luego, en el cuatro trimestre del año, la variación trimestral también fue positiva, de un 7 %.
La formación bruta de capital, un indicador utilizado para medir la inversión privada, mostró también un aumento de 33.99 % en el tercer trimestre comparado con el segundo, y de 29.2 % al cuarto trimestre, frente a los tres meses previos.
El ritmo de recuperación que ha logrado el país, con un fuerte respaldo de la inversión pública y las medidas implementadas para mejorar los servicios gubernamentales para la población, también mejoran la expectativa de cierre para 2021. El BCR prevé que este año el país se recuperará entre el 5.5 % y el 6 % .