Turquía y Siria buscan contra reloj a los supervivientes de los terremotos que hasta el momento han causado más de 5 mil muertos y 20 mil heridos. Además del temor de las réplicas, los turcos han luchado contra las bajas temperaturas con fogatas improvisadas.
Cientos de miles de personas han pasado la noche en sus vehículos o en polideportivos y refugios. Las autoridades temen que la cifra final de víctimas sea mucho más alta. Hasta el momento Turquía reporta ocho mil personas rescatadas de entre los escombros.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha declarado el estado de excepción en las zonas afectadas por el terremoto, que estará en vigor al menos durante tres meses.
Solo en Turquía ya se han contabilizado más de 5,000 edificios destruidos. La Organización Mundial de la Salud (OMS) teme que el número de muertos continúe aumentando hasta superar los 20,000.
