En una decisión histórica, la Corte Suprema de Estados Unidos amplió el derecho de los ciudadanos a portar armas en público y elimina esas facultades a los estados de decidir al respecto.

El tribunal tomó tal determinación con seis votos a favor y tres en contra tras realizar un estudio minucioso sobre el caso.

La resolución deja sin efecto una ley que restringía la tenencia de armas en las calles de Nueva York donde los habitantes requerían de una licencia especial para portarlas.

Los estados de California, Hawái, Maryland, Massachussets, Nueva Jersey y Rhode Island también cuentan con leyes similares.

El fallo emitido ocurre en momentos en que el congreso y los estados profundizan sobre la necesidad de contar con una ley para el control de armas y en medio de recientes masacres en Texas, Nueva York y California.