Datos de la prestigiosa Universidad de Oxford desmintió publicaciones de los “periodistas incómodos” que buscan minimizar a toda costa la exitosa campaña de vacunación del Gobierno del Presidente Nayib Bukele que está salvando la vida de miles de salvadoreños contra la mortal pandemia del Covid-19.
“Estos son los autodenominados “periodistas incómodos” en nuestro país”, escribió el mandatario la tarde del domingo en sus redes sociales haciendo referencia a una publicación de la revista FOCUS, que al igual que la revista Factum y GatoEncerrado, buscan confundir a los salvadoreños sobre el trabajo del Gobierno.
En su cuenta de Twitter, Bukele señaló que dicho medio está “mintiendo DESCARADAMENTE, tratando de engañar a la población. Luego se quejan de que nadie les cree y que los “atacan en redes sociales”, agregó.
Según FOCUS, el gobierno informó que hasta el 20 de abril vacunó a 622,912 personas, pero el observatorio de la Universidad de Oxford solo reporta la vacunación de 200.000 salvadoreños, una versión que contrasta con la realidad por la masiva vacunación que mantiene el Ejecutivo.
El mandatario desmintió dicha versión de los “periodistas incómodos” publicando a su vez un informe oficial del observatorio de la Universidad de Oxford en la que presenta estadísticas de vacunación que superan los 600.000 inmunizados como lo ha detallado el Gobierno de Bukele.
En la gráfica se observa claramente el incremento de las inmunizaciones desde el inicio del Plan de Vacunación masivo a partir del 17 de febrero pasado, lo que ha salvado la vida de miles de salvadoreños.
La estrategia de vacunación del Presidente Bukele ha recibido elogios de potencias mundiales e incluso de la Organización Mundial de la Salud. El plan inicio con la vacunación del personal de primera línea como médicos y enfermeras quienes están salvando la vida de los afectados, además de soldados de la Fuerza Armada y agentes de la Policía Nacional Civil que ayudan en los traslados de estos.
El proceso incluyó además al personal de segunda línea como médicos y enfermeras que no cubren directamente a los afectados por el virus. También personas con enfermedades crónicas, docentes, entre otros.