El Gobierno ha acercado a las comunidades los servicios gratis para la detección de COVID-19, además, a los pacientes positivos, o con sospechas, les entregan gratuitamente el tratamiento para la recuperación.

El programa de tamizajes comunitario y centinela para la detección de COVID-19 es de las principales acciones sanitarias que mantiene el Gobierno del Presidente Nayib Bukele en la lucha antipandémica.

Desde el aparecimiento de los primeros casos de pacientes confirmados con el virus en el país, en marzo de 2020, el Gobierno empezó a implementar la toma del examen nasofaríngeo para confirmar la presencia del virus en el organismo.

A esta fecha se contabilizan 1,758,939 pruebas de Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR, por sus siglas en inglés) las cuales han sido de mucha ayuda para los equipos de epidemiólogos del país en la toma de decisión para diseñar estrategias de prevención.

Del total de los exámenes PCR desarrollados, han sido confirmados 156,364 pacientes positivos al SARS-CoV-2 en un poco más de dos años de la pandemia, de ellos fallecieron 4,086 personas, el resto, la inmensa mayoría, se recuperó.

El testeo para COVID-19 se hace todos los días en diferentes zonas del país; el Equipo Interdisciplinario de Contención Epidemiológica (EICE) de El Salvador, se instala en lugares públicos como parques y plazas en municipios para la toma de muestra.

La población tiene la oportunidad de descartar estar contagiado con el resultado de la prueba, que recibe en un máximo de 72 horas, vía telefónica.

Si el resultado es positivo, el gobierno le hace llegar hasta la puerta de la casa un kit con el tratamiento médico para su recuperación, que incluye el Molnupiravir el potente fármaco que ayuda a que la infección causada por el virus no se desarrolle a las formas más complejas.