El Salvador vivió otro día más sin homicidios. Así lo confirmó el Presidente Nayib Bukele Ortez en horas de la madrugada de este viernes por medio de su cuenta de Twitter.

Se trata del día número 28 sin asesinatos durante la gestión del Presidente Bukele y 22 en lo que va del 2020. La reducción en los índices de homicidios y de otros delitos en el país son el resultado de la implementación del Plan Control Territorial.

“Podemos confirmar que hemos cerrado el jueves 30 de julio con 0 homicidios a nivel nacional. Delincuencia: Controlada. Y eso que el Plan Control Territorial apenas va en primera fase, imaginemos a nuestro país sin el bloqueo de la Asamblea legislativa a las demás fases del plan”, escribió el mandatario en su cuenta de Twitter.

Además de la reducción de los homicidios se ha registrado una baja en la cifra de los desaparecidos y en los asesinatos de mujeres.

El ministro de Justicia y Seguridad, Rogelio Rivas, reconoce los logros de la estrategia de seguridad, a pesar del bloqueo de los diputados de la Asamblea Legislativa. “Este jueves no se registró ningún homicidio, en el pasado nadie se hubiera imaginado estos resultados, que ya suman 28 días sin asesinatos en este Gobierno. Estos esfuerzos se han logrado, pese a bloqueos de los mismos de siempre, que no les importa la vida de los salvadoreños”, señaló el ministro Rivas.

La diputada Felissa Cristales reconoció el resultado de la estrategia de seguridad, pero lastimosamente sus colegas de la Asamblea Legislativa no lo apoyan. “Otro Plan que seguramente nos beneficiaría a todos pero que nunca se volvió a discutir en la Asamblea. Demuestra que están totalmente desconectados de las necesidades de los salvadoreños. Ojalá no pase lo mismo que con el préstamo del BID”.

A un año de su implementación, los diputados de la Asamblea Legislativa no muestran su apoyo para aprobar los préstamos que permitirán modernizar y equipar a las fuerzas de seguridad del país.

Para la implementación del Plan Control Territorial se invertirán $575.2 millones, de los cuales $200 millones serían financiados por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE); estos a su vez se dividen en dos préstamos: uno por $91 millones para la fase II, llamada “Oportunidad” y otro por $109 millones para la fase III, denominada “Modernización”.