Después de cada tormenta, un equipo de la Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillados (ANDA), se disponen a limpiar todo el arrastre que llevan los ríos a las plantas potabilizadoras de agua potable.

“Después de la tormenta se debe limpiar todo el arrastre que esta nos deja”, aseguró el presidente de la autónoma, Rubén Alemán.

Con esa tarea asignada a los empleados de la institución, Alemán brindo su reconocimiento por esta ardua labor para garantizar la calidad del recurso hídrico a la población salvadoreña.

“Agradecido con el equipo de las plantas potabilizadoras de agua superficial por su gran trabajo salvaguardando la infraestructura”, puntualizó en sus redes sociales.