La humillante derrota electoral que sufrió el partido Arena en las pasadas elecciones, sepultó por completo sus aspiraciones por salir del fango político en el que cayó desde hace varias elecciones y quedó, incluso, en la ruta de una desaparición.

Según analistas, esa debacle fue originada por las desastrosas decisiones tomadas por sus dirigentes Mauricio Interiano, Gustavo López Davidson y Erick Salguero. Además, se suma la tención que generó Javier Simán, a quien los areneros no le permitieron dirigir al partido.

Interiano renunció a la presidencia del Consejo Ejecutivo Nacional (COENA) tras la presión de los mismos areneros luego que el actual Presidente Nayib Bukele les desbarató los planes de seguir con la corrupción galopante al ganar los comicios del 3 de febrero.

“Mi trabajo al frente de ARENA ha concluido, pero mi trabajo por el país apenas comienza”, detalló, asegurando que su intención siempre fue cambiar el partido tricolor, pero que las luchas e intrigas provocadas por grupos de poder le hicieron imposible eso.

La debacle del flamante partido tricolor la continuó Gustavo López Davidson, quien a inicio de 2020 anunció su renuncia para enfrentar los procesos judiciales por el hurto de armamento de la Fuerza Armada de parte la empresa Centrum, propiedad del político que incluso lo llevó posteriormente a su detención.

El desastre mayor, que incluso encamina al partido Arena a su desaparición, ha sido bajo la dirección de Erick Salguero ya que en el que pasado 28 de febrero los salvadoreños decidieron darle la espalda y terminar con el último bastión de corrupción del tricolor en la Asamblea Legislativa.

A pesar de los pedidos de perdón, los salvadoreños les dieron la espalda y brindaron su rotundo apoyo al partido Nuevas Ideas, que a partir del 1 de mayo próximo ha prometido cambiar la historia de El Salvador gobernando al menos 152 alcaldías en coalición y dirigiendo la Asamblea Legislativa con 61 diputados, junto con el partido GANA.

Para Arena no son nuevas las denuncias de corrupción debido a que carga además señalamiento contra cuatro expresidentes que gobernaron el país bajo la bandera de este instituto político denunciados por actos en perjuicio del pueblo salvadoreño.