Los partidos políticos de Arena y Fmln suman 30 años en el poder, tanto en el Ejecutivo como en el órgano Legislativo. Sin embargo, nunca promovieron una verdadera ley de agua que beneficie a la gran mayoría de la población.

Arena aumentó el beneficio de los pozos privados (incluyendo en la casa de Norman Quijano), y terminó con su expresidente de ANDA, Carlos Perla, condenado por corrupción.

El Fmln olvidó el derecho al agua de los salvadoreños en sus diez años. Ahora, por medio de una diputada, de su bancada de cuatro legisladores, pretende obligar a Nuevas Ideas a aprobar una ley hecha por Fmln y Arena, es decir, que protege sus intereses partidarios.

La diputada Dina Argueta dice que ahora sí «es urgente»: «Es sumamente urgente que se retome en la agenda la Ley General de Aguas y otros temas trascendentales», escribió en Twitter.

Los analistas concuerdan en que ni el Fmln ni Arena han «caído en el 20» que los salvadoreños los expulsaron no solo del Ejecutivo, sino también de la Asamblea Legislativa por sus acciones en contra de la gran mayoría.