Ante la llegada de la próxima estación lluviosa, el Gobierno implementa una campaña de fumigación para destruir criaderos del zancudo, y así proteger a la población contra el dengue.
La llegada de la época lluviosa se acerca por lo que el Gobierno del Presidente Nayib Bukele, por medio del Ministerio de Salud y otras instituciones públicas, impulsa una campaña de vacunación a escala nacional para evitar un repunte de casos de dengue.
Así lo confirmó el titular del Ministerio de Salud, Francisco Alabi, quien destacó: «Tenemos equipos en el territorio ejecutando todas las acciones para el control de vectores. Hemos priorizado 122 municipios, para proteger a la población del dengue».
Durante las acciones, también se trata de ubicar a personas que presenten síntomas de la enfermedad, para remitirla a las unidades de salud, explicó el funcionario.
Alabi añadió que, en esta ocasión, se ha reforzado la campaña con la disposición de camiones que andan recolectando depósitos inservibles y chatarra, para evitar que se conviertan en criaderos del mosquito transmisor del dengue, zika y chicungunya.
«En cada jornada de control del dengue realizamos búsqueda de pacientes febriles, identificación y destrucción de criaderos, fumigación y hemos puesto a disposición camiones para que la población pueda deshacerse de chatarra que puede acumular agua», dijo el ministro Alabi.
El funcionario recordó que «el dengue es una enfermedad que afecta al país año con año, estamos impulsando medidas para identificar casos sospechosos y para controlar los criaderos de zancudos y fumigación para la eliminación de zancudo adulto».
Uno de los municipios donde este día se lleva a cabo la fumigación es Sensuntepeque, la cual cuenta con el apoyo de la Gobernación Departamental de Cabañas y la Dirección Municipal de Protección Civil. La jornada incluye la entrega de abate.
Las autoridades de Salud recomiendan a la población que, para evitar la proliferación de zancudos, es necesario destruir todo recipiente que se pueda convertir en criadero, así como voltear estopas de coco y llantas, además de mantener tapado todo depósito de agua y lavar pilas y barriles cada semana, entre otras medidas.