A la fecha la Presidencia de la República ha retornado 2,090 salvadoreños procedentes de diferentes partes del mundo mediante el Plan de Repatriación iniciado el 1 de mayo.
Debido al cierre del Aeropuerto Internacional San Óscar Arnulfo Romero y Galdámez y terminales aéreas de otros países en el marco de la emergecia por el nuevo conavirus, los connacionales no habían podido ingresar a territorio salvadoreño. Pese a ello, el Ejecutivo diseñó una estrategia para lograr una repatriación segura y ordenada en medio de la emergencia nacional en la cual el Ministerio de Relaciones Exteriores y otras instituciones trabajaron de forma articulada.
Argentina, Chile, Uruguay, Paraguay, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Belice, Panamá, República Dominicana, Jamaica, Perú, Estados Unidos, México, Colombia, Canadá, Barbados, Brasil y España son las naciones desde las cuales el Gobierno ha gestionado el regreso de la diáspora salvadoreña.
Por medio del Centro de Operaciones para la Asistencia Consular Remota que, a la fecha, ha procesado más de 4,200 solicitudes de salvadoreños alrededor del mundo, Cancillería asesoró de forma oportuna a los coterráneos mientras permanecían en tierras extranjeras a través del apoyo de las embajadas y consulados salvadoreños en áreas específicas como salud, alimentación y hospedaje.
Cabe destacar que Cancillería ha realizado una inversión que ronda los $235 mil en alimentación, alojamiento y medicamentos para salvadoreños con distintas patologías en naciones como Alemania, España, Luxemburgo y China. De hecho, la autónoma ha entregado más de 2,811 medicamentos.
A su arribo a la terminal aérea o fronteras terrestres, los compatriotas pasan por controles sanitarios y migratorios implementados por el personal del Ministerio de Salud y la Dirección General de Migración y Extranjería, respectivamente.
A medida que las actividades aeroportuarias en otros países se reactivan, irá incrementando el número de connacionales que llegarán al país.
Para finalizar, el número de connacionales repatriados irá incrementando de forma gradual, en la medida que otros países reactiven sus actividades aeroportuarias.
