Exfiscal Douglas Meléndez: «Mitchelle Guzmán se vuelve casi una obra pública, por toda la inversión de fondos públicos que hizo en ella el expresidente».
El 6 de diciembre de 2,011 el entonces Presidente de la República Mauricio Funes ordenó extender el pasaporte diplomático D005383 a Ada Michelle Guzmán Sigüenza.
Dicha orden llevaba el código CAPRES, lo que significa que fue emitida por Casa Presidencial. Fuentes afirman que las altas esferas cumplieron la orden porque era de su conocimiento que Ada Mitchelle Guzmán era la amante del gobernante y, aunque en aquel entonces estuviera casado con Vanda Pignato; de manera extraoficial se le decía «primera dama» a Guzmán.
Según la Fiscalía General de la República, con el pasaporte extendido por CAPRES: Ada Mitchelle viajó a Beverly Hills, para someterse a varias cirugías cosméticas; cuyo costo fue justificado como «gastos públicos». Dichas operaciones tuvieron un costo de $60,000.
Además, Guzmán habría gastado alrededor de medio millón de dólares en artículos personales; habría recibido $10.000 mensuales por ser gerente del Latin America Spa, procedentes de fondos públicos; habría derrochado más de $200,000 en vehículos suntuosos; y habría utilizado casi $4,000 en gastos hospitalarios.
Por si eso fuera poco, la FGR ha hecho de conocimiento público que Ada Mitchelle utilizó $92,000; provenientes del tesoro público, para gastos de supermercado; y habría derrochado $15,000 en implementos deportivos, los cuales habrían sido comprados por trabajadores presidenciales con las tarjetas de crédito habilitadas para Guzmán. De igual manera, Ada Mitchelle habría desembolsado $17,000 en aperturas a depósitos a plazos, así como $49,000 en apertura de préstamos bancarios.
Adicionalmente, de acuerdo a la FGR, Funes gastó cerca de $5 millones en viajes de lujo a diferentes partes del mundo, en compañía de Guzmán y otras personas allegadas al excomunicador. Asimismo, el exgobernante llegó a habilitar hasta $193,000 para pago de deudas y créditos bancarios para familiares de Ada Mitchelle.
En ese marco, la FGR ha informado que la madre de Guzmán derrochó $12,000 en compra de carros, y $8,000 en viajes de placer. Del mismo modo, habría depositado $42,000 y pagado créditos por la suma de $154,000.