Funes hizo este jueves la petición durante una entrevista televisiva realizada desde Nicaragua, donde se encuentra escondido desde que se conoció las investigaciones en su contra.

Mauricio Funes, actualmente prófugo de la justicia por delitos de corrupción, aseguró que le gustaría que su padre fuera uno de los beneficiados con la aplicación de la vacuna contra el COVID-19, adquirida por el gobierno del presidente Nayib Bukele.

Funes, a quien se le siguen seis procesos judiciales acumulando un gajo de delitos entre los que destacan peculado, agrupaciones Ilícitas, actos arbitrarios e incumplimiento de deberes, entre otros, cometidos durante su gestión presidencial entre 2009 y 2014, y que actualmente huye de la justicia, se consideró que es uno de los primeros en alegrarse con la llegada de la vacuna contra el COVID-19 a El Salvador.

“Yo soy de los primeros que me alegro, por yo tengo a mi padre vivo aún que tiene 94 años y que entraría de hecho en el grupo de más alto riesgo, y me encantaría que fuera uno del grupo de más alto riesgo que pudiera ser vacunado”, dijo Funes este jueves durante una entrevista televisiva realizada desde Nicaragua, donde se encuentra escondido desde que se conoció las investigaciones en su contra.

Ayer se conoció que Costa Rica autorizó la extradición del suegro de Funes, Juan Carlos Guzmán Berdugo, acusado del delito de lavado de dinero.

Guzmán Berdugo es padre de Ada Mitchell Guzmán, madre de uno de los hijos de Funes y con quien reside en Nicaragua, es acusado de pertenecer a una presunta red de corrupción, encabezada por Funes, considerado responsable de sustraer de manera ilícita $ 351 millones del Estado, cuando fue presidente de la república.