El ministro de Justicia y Seguridad detalló que mensualmente de las personas que han sido reportadas como desaparecidas son cerca del 4% las que se ubican sin vida.

El ministro de Justicia y Seguridad, Rogelio Rivas, aclaró que no necesariamente una persona desaparecida corresponde a un homicidio.

El funcionario detalló que mensualmente de las personas que han sido reportadas como desaparecidas son cerca del 4% las que se ubican sin vida.

“Lo que pasa es que evidentemente cuando se encuentra una osamenta en estado avanzado de descomposición es una noticia mediática que impacta mucho en la sociedad salvadoreña y se tiene la percepción de que los homicidios han bajado, pero que se están cometiendo homicidios a través de las desapariciones y no es así”, dijo.

El ministro informó que en el mes de febrero se recibieron 144 denuncias de personas desaparecidas, de estas, 44 fueron ubicadas con vida, 99 casos siguen activos en su protocolo de búsqueda y solo una persona fue encontrada sin vida.

Indicó que el 60% de los casos de personas que son reportadas como desaparecidas son producto de problemas sentimentales, por consumo de droga, problemas familiares, problemas de salud mental o realizan diligencias y no se comunican con sus familias.

“Hace algunos meses un empleado de la Procuraduría de Derechos Humanos la familia lo había reportado como desaparecido, incluso el mismo procurador salió denunciando la desaparición de este empleado, pero resulta que lo encontramos con una gran cantidad de droga que estaba siendo consumida por él en un hospedaje”, ejemplificó.

El funcionario dijo que casos como el anterior son muy frecuentes y que por tanto, una persona desaparecida no siempre equivale a una persona fallecida.

Sin embargo, apuntó que cuando se ponga en marcha el Centro de Investigación Forense se facilitará el trabajo para determinar a la mayor brevedad si las osamentas que se encuentren corresponden a algún caso de desaparición.