El titular de Trabajo, Rolando Castro, sostuvo que es ilegal que las autoridades de la Asamblea se nieguen a dicha inspección, para determinar si hay más de 1,000 plazas llamadas “fantasmas”.

El presidente del Congreso, Mario Ponce, está poniendo trabas a la inspección que el Ministerio de Trabajo está realizando en ese órgano del Estado para verificar si hay plazas de personas que solo llegan a cobrar una vez al mes sin prestar sus servicios, tal como lo ha denunciado el sindicato legislativo.

El titular de Trabajo, Rolando Castro, sostuvo que es ilegal que las autoridades de la Asamblea se nieguen a dicha inspección, para determinar si hay más de 1,000 plazas llamadas “fantasmas”.

“Estamos haciendo una inspección en la Asamblea, y el Presidente de dicho órgano de Estado está obstaculizando nuestra inspección. Le recuerdo diputado que obstruir nuestro trabajo es un acto ilegal. Seguiremos haciendo lo que la ley manda y no daremos marcha atrás”, publicó el funcionario en su cuenta de Twitter.

De acuerdo con las denuncias de los sindicalistas, cientos de supuestos trabajadores se han acercado al sindicato para afiliarse y buscar un blindaje ante la llegada de los nuevos diputados a partir del 1 de mayo.

Diputados electos por el partido Nuevas Ideas, entre ellos Ernesto Castro, han señalado que esas plazas son otorgadas a activistas de los partidos políticos o para pagar favores, poniendo en desventaja a los empleados institucionales que sí realizan una labor dentro de ese órgano estatal.

Es más, según ha salido a la luz, los asesores de la bancada de ARENA y el FMLN, Rafael Lemus y Víctor Suazo, respectivamente, están buscando ampararse en ley de salarios para no ser despedidos, pues siempre han tenido un cargo de confianza en ambos partidos.

Los dos, además, participaron como candidatos a diputados pero no obtuvieron el apoyo de la población.