El ministro de Obras Públicas, Romeo Rodríguez Herrera, manifestó que desde la instauración del subsidio de diésel, los gobiernos han cancelado centenares de millones de dólares a los transportistas, pero este beneficio no ha sido compensado por los empresarios con un mejor servicio y calidad del transporte. «Se han pagado $466.2 millones y no hemos visto cambios».
Rodríguez, dijo que el Gobierno insistirá en la aprobación de una Ley de Compensación Económica que condicione la entrega de combustible al cumplimiento de las normativas de tránsito, el respeto a los usuarios, el mejoramiento del servicio y un control exhaustivo de los viajes de cada unidad subsidiada de transporte a través de un sistema GPS.
«Nosotros hemos sido claros desde que iniciamos. Hemos pedido que se apruebe la Ley de Compensación Económica, pero con condiciones de mejora en el servicio», recalcó Rodríguez Herrera.
La propuesta se encuentra en la Asamblea, pero los diputados la han ignorado. El sector transporte ha sido un histórico aliado y financista de diferentes partidos, que han terminado aprobando innumerables leyes a su favor y en detrimento de la población. También representantes del sector han llegado a diputados, como es el caso del actual jefe de fracción de ARENA, Carlos Reyes.
Subrayó el ministro que los buses debían renovarse cada 15 años, pero la ley actual establece que son 20 años de vida útil de cada unidad. Con todo y eso, «ahora los diputados de la Asamblea Legislativa están promoviendo que tengan dos años más, es decir, que tengan 22 años de vida útil», lo que no beneficia a los usuarios.