Extraditan a El Salvador al suegro de Mauricio Funes.

Con un fuerte dispositivo de seguridad fue llevado Juan Carlos Guzmán Berdugo al Juzgado Octavo de Instrucción del Centro Judicial Isidro Menéndez de San Salvador, para ser intimado por el delito de lavado de dinero y activos en el caso que la Fiscalía General de la República (FGR) denominó “Saqueo Público”.

Guzmán Berdugo, suegro del prófugo de la justicia salvadoreña y expresidente de la República, Mauricio Funes, fue extraditado la tarde de este miércoles desde Costa Rica a El Salvador, por medio de dos aeronaves de la Fuerza Aérea Salvadoreña (FAES), llegando al filo de las 5:50 al Aeropuerto Internacional de Ilopango, departamento de San Salvador.

El imputado fue recibido por el fiscal General de la República, Rodolfo Delgado, quien le hizo ver sus derechos y notificarle los cargos por lo que fue detenido en Costa Rica y extraditado a El Salvador.

Juan Carlos Guzmán Berdugo padre de Ada Michelle Guzmán, mejor conocida como “Michi” y esposa de Mauricio Funes, es señalado de formar parte de una estructura que montó el exmandatario salvadoreño para drenar unos 351 millones de dólares de las arcas del Estado durante su mandato entre el 1 de junio del 2009 al 31 de mayo del 2014.

La Fiscalía General de la República lo acusa de haber recibido parte del dinero extraído del Estado, por parte de una estructura relacionada con el expresidente. Las investigaciones han establecido que el imputado reportó gastos por $140,756.43, que no concordaron con sus ingresos, que fueron de $7,196.72.

Además de esas sumas, al padre de Ada Mitchell Guzmán, pareja de Funes, se le detectó la compra de cinco carros por un valor de $55,000 sin que tuviera cómo justificar el origen del dinero.

Juan Carlos Guzmán Berdugo fue capturado por autoridades costarricenses el 1 de abril de 2019, cuando intentaba salir del país con destino a Panamá.

Por este mismo delito fue condenada a tres años de cárcel la exesposa de Mauricio Funes, Regina Cañas Rivera, mejor conocida como “Tía Bubu”, quien en proceso abreviado reconoció los hechos de simulación de un contrato de un préstamo por 95 mil dólares que le habría otorgado a su hijo Diego Funes Cañas. El dinero lo regresó al Estado y por ello recibió 144 horas de jornadas de trabajo comunitario.

Regina Cañas Rivera fue abandonada por su expareja, quien dijo que él no le entregó dinero y que la simulación del contrato lo fabricó ella, por lo que tiene que responder por sus actos.

El prófugo Mauricio Funes gozó de la complicidad de las autoridades para salir del país en el 2016 y refugiarse en Nicaragua, donde inicialmente fue asilado y luego recibió su nacionalización de forma exprés.

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