La Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA) considera que la Fiscalía General de la República (FGR) necesita reformas, pero no como la propuesta presentada por el fiscal general porque esta lleva implícitos riesgos para el respeto a los derechos humanos.
En su editorial, la UCA plantea una lista de las grandes debilidades de la institución, comenzando por el nombramiento político de su titular, las deficiencias en la investigación, las pocas condenas que se consiguen en los tribunales, la impunidad, el centralismo autoritario, la mala relación con la PNC en casos importantes y, a la vez, la tendencia a aceptar sin crítica la información policial sobre delitos sin mayor repercusión social son algunas de las múltiples deficiencias de la Fiscalía.
La UCA señala que es cierto que la investigación fiscal debe mejorarse, pero la idea de crear el Cuerpo Técnico de Investigación Criminal no solucionará nada.
“En vez de ser un cuerpo de investigadores especializados, la propuesta los caracteriza como simples policías, adaptados y obedientes al mandato de los fiscales e incluso con posibilidad de acciones encubiertas”, detalla el editorial.
En el texto se señala que para evitar que el nombramiento del fiscal general siga siendo un acto politizado en extremo, podría incorporarse un proceso ciudadano de calificación de los candidatos y una especie de auditoría de los nombramientos. Además, cuestiona la jerarquía en la institución.