El Juzgado 4° de Paz de San Salvador ordenó este lunes que los cinco acusados por una estampida en que murieron nueve personas en un partido de fútbol en el estadio Cuscatlán el 20 de mayo sigan en prisión, mientras continúa el proceso.
La Fiscalía judicializó el caso por el delito de agrupaciones ilícitas, pero el juez modificó el delito y lo calificó como infracción a las reglas de seguridad establecido en el artículo 267 en relación al artículo 268 del Código Penal en la modalidad agravada.
«Estos hechos que se les atribuye a los ahora procesados tienen lugar en razón del evento ocurrido el día 20 de mayo del año 2023 en la cual se dio la estampida humana en el evento deportivo del equipo Alianza Fútbol Club y el equipo Club Deportivo FAS», indicó una de las fiscales.
Los acusados son Pedro Hernández, presidente del equipo de futbol Alianza; Edwin Abarca Ventura, gerente de seguridad de Alianza; Zoila Córdova, gerente financiera de Alianza; Reynaldo Avelar Contreras, gerente general de Escenarios Deportivos de El Salvador (EDESSA) y Samuel García Montano, encargado de las llaves del estadio durante el incidente.
El pasado 2 de junio los cinco imputados quedaron el libertad tras llegar a un acuerdo conciliatorio con 51 aficionados lesionados y los parientes de nueve fallecidos en la estampida que terminó en tragedia en el estadio Cuscatlán, sin embargo, la Fiscalía apeló la resolución en la Cámara Primero de lo Penal de San Salvador.
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