Aunque la oposición legislativa aprobó una ley para limitar el trabajo de la Fuerza Armada; El Ejecutivo recalcó que la institución castrense, que ha renovado para servir a los salvadoreños, seguirá brindando seguridad y colaborando en labores humanitarias de beneficio para la ciudadanía

La normativa aprobada por los parlamentarios incluye un apartado donde se le prohíbe a cualquier funcionario hacerse acompañar de la Fuerza Armada, en las acciones para combatir la pandemia. Por ejemplo, en los cercos sanitarios, donde el Ministerio de Defensa realiza la importante labor de proteger a las personas y contribuir a la logística del reparto de los paquetes alimentarios.

De igual manera, la legislación manda al Ejército que se abstenga de acompañar en las tareas de entrega de dichos paquetes a la población, actividades en las que también proporciona seguridad a funcionarios y ciudadanos beneficiados, sobre todo en zonas de alto riesgo.

La Fuerza Armada, además de cooperar en la lucha contra la pandemia, ha llevado a cabo labores humanitarias durante desastres naturales; como el caso de las tormentas tropicales, Amanda y Cristóbal; y el reciente deslave en Nejapa, que dejó nueve fallecidos y más de 130 viviendas dañadas.

Los militares también han jugado un papel de primer orden en el desarrollo del Plan Control Territorial; el cual, pese al bloqueo de los diputados; ha logrado la disminución de más del 50% de diversos delitos, como homicidios, extorsiones, robos, etc. Por este motivo, el Presupuesto General de la Nación 2,021 comprende una importante inversión para reforzar al Ministerio de Defensa y dignificar el trabajo de la institución castrense.