Las cabinas móviles para la detección del COVID-19  se instalaron hoy en Candelaria, Cuscatlán donde cientos de personas llegaron al lugar para hacerse la prueba.

“Depende de la familia y de uno protegerse del COVID-19, pero con los tamizajes uno sabe hasta dónde llegar y no esperar porque sería demasiado tarde”, dijo Juan Carlos López, quien se aplicó la prueba.

Otro tamizaje desarrolló el Ministerio de Salud a través del EICE en el municipio de Guazapa, San Salvador para la detección del COVID-19 en los habitantes.

Cecilia Mauris, habitante de Guazapa, calificó la medida como “buena” porque se aproxima al servicio a las personas y de forma gratuita.

Ella aseguró que aprovechó que pasaba por el lugar para conocer su estado de salud respecto al coronavirus.