El ministro de Seguridad y Justicia, Gustavo Villatoro, dijo que el esclarecimiento del caso de Flor María García fue producto de una “sinergia positiva” entre la Policía Nacional Civil (PNC) y la Fiscalía General de la República (FGR) que por muchos años fue dividida por las “políticas torpes” de los gobiernos de ARENA y el FMLN.
Esos gobiernos “promovían ese desacuerdo entre estas dos instituciones precisamente para ellos seguir lucrándose con la violencia despampanante que tuvimos en esos 30 años que siempre fue gradual hacia arriba, nunca hacia abajo”, dijo el ministro Villatoro en Noticiero El Salvador.
El funcionario destacó un “trabajo arduo, profesional que por más de tres meses realizó la Policía en coordinación con la Fiscalía” al innovar en técnicas de investigación que terminaron con la captura del esposo de la víctima, Joel Omar Valle Leiva y del primo del supuesto asesino, Francisco Boanerges Valle Quesada.
Valle Leiva denunció la desaparición de su esposa el 16 de marzo pasado, pero sospechas de la familia de la víctima por antecedentes de violencia intrafamiliar, dio un nuevo giro a las investigaciones terminando con las capturas de los supuestos implicados el pasado 25 de junio.
Fue el propio esposo de Flor María García, quien brindó detalles sobre el crimen y dijo el lugar donde sepultó los restos en una zona de la Finca La Paz, kilometro 32 carretera Panamericana en las afueras de Cojutepeque, departamento de Cuscatlán.
“Este caso demuestra que ese trabajo coordinado siempre va a ser en contra de los delincuentes y siempre a favor de la comunidad”, señaló el ministro de Seguridad y Justicia.
El Presidente de la República, Nayib Bukele, reaccionó a un comentario de Isabel García, hermana de la víctima que destacó la labor de la PNC y la Fiscalía para resolver el caso y llevar a la cárcel a los responsables.
García escribió en sus redes sociales que “durante 3 meses tuvimos que fingir que las autoridades no hacían nada para que este tipo se confiara de verdad, pero el trabajo de las autoridades es invaluable”.
“Por tres meses recibimos ataques en redes sociales y teníamos que guardar silencio para no entorpecer las investigaciones”, explicó el mandatario quien señaló que “no era para nada agradable no poder contestar, pero era lo correcto”.