«Somos un chingo de gente involucrada, si se ofrece tengo power para toda la manada, proyectiles, fusiles, una que otra blindada, se miran de nuevo camionetas empotradas», canciones con este tipo de lírica, ilustradas con vídeos de hombres armados, camionetas de lujo y fajos de dólares, publicaba en su cuenta de Tik Tok, el pandillero David Ernesto Bermúdez Ramírez.

Bermúdez Ramírez forma parte de un grupo de 26 pandilleros capturados el jueves en un operativo conjunto de la Fiscalía General de la República y la Policía Nacional Civil en varios puntos del departamento de Morazán, acusados de extorsión agravada y homicidio agravado tentado.

En un rancho a nombre de Bermúdez, al pandillero encargado de administrar el dinero de la extorsión, le fueron decomisados cuatro fusiles y dos armas cortas, un mono cara blanca, una tortuga y una guara, además de ocho vehículos de lujo, entre los que figuran un Cadillac y una camioneta hummer.

En su cuenta de Tik Tok, que registra más de14 mil seguidores, el delincuente publicaba frecuentemente vídeos donde exhibía su ostentosa vida, al estilo de los jefes de los carteles del narcotráfico, en un rancho con piscina y hombres armados.

Los caballos no podían faltar en la cuenta de este tiktoker pandillero con inclinación por el mundo narco, quien en algunos vídeos exhibe ejemplares tradicionales y también de ponis montados por adultos armados y niños.

Una cama cubierta de billetes de $20, $50 y $100, un ramo de rosas con billetes de $100 enrollados colocados entre las flores, que le regaló a su esposa, también fue motivo de otro vídeo, pero en este caso sustituyó los corridos de narcos por una canción de Franco de Vita: «si me dieran a elegir una vez más, te elegiría sin pensarlo».

Bombones, una botella de vino y un rótulo con la frase «Te amo mamita linda» completan el obsequio que solo en dinero podría llegar a los 3 mil dólares. La Policía y la FGR relacionan a Bermúdez Martínez con cinco casos de extorsión entre los años 2019 y 2020.

En otro vídeo aparece comprándole con un billete de $100 a una vendedora. Ella le explica que no tiene para darle cambio. Sin dejar de gravar a la comerciante, el pandillero le dice que se quede con el billete y que solo le regrese en productos los $15 que le compró. «Dios se lo pague», le responde la mujer un poco desconcertada.

San Simón, el santo apócrifo de los borrachos y también venerados por narcotraficantes y pandilleros, aparece en otra grabación. Un figura más alta de este polémico santo flanqueada por otras dos mas pequeñas, rodeadas de veladoras y botellas de licor.

Emborracharse y hacer vídeos con música de narcos, parecía de las pocas actividades que desarrollaban quienes pernoctaban en ese rancho ubicado en el sector de Corinto, departamento de Morazán.