El Real Madrid se ha caracterizado por ser un equipo ofensivo lo cual le ha permitido contar con un plantel repleto de estrellas, pero en los últimos años el equipo merengue se ha caracterizado por la venta de varios de sus jugadores y así poder contar con liquidez para adquirir otros.

Desde la salida de Cristiano Ronaldo en 2018 por €117 millones los blancos han ingresado 584 millones más en ventas. La temporada más satisfactoria, la 2019-2020. El adiós de Casemiro (30 años) del Real Madrid, más allá de ser un jugador clave para Ancelotti y uno de los mejores mediocentros defensivos del mundo en la actualidad, deja una importante cuantía económica: 72 millones más 13 en variables. Y es que el Madrid, además de fichar por cantidades elevadas de dinero, se ha caracterizado en los últimos años por ser un equipo vendedor.

Con lo anterior expuesto, se entiende que la mayoría de las ventas que ha hecho el equipo blanco se han realizado durante un periodo corto de tiempo y estas han sido salidas beneficiosas para el club. Odegaard (35 millones), Theo Hernández (21,5) o Marcos Llorente (30) han sido jugadores que están destacando en sus actuales equipos pero que no lograron triunfar en el Madrid.

Estas salidas permitieron también la oportunidad a estos jugadores de triunfar en sus actuales clubes.