El gobierno de Daniel Ortega está tratando de desterrar a las autoridades de la Iglesia Católica con el fin de que no divulguen las acciones represivas que está cometiendo contra la población nicaragüense.

La policía de Nicaragua capturó al obispo de Matagalpa, Rolando Álvarez, a quien mantienen en arresto domiciliario. El régimen orteguista acusa al obispo de organizar grupos violentos para ejecutar actos de odio contra la presidencia de Ortega.

Además, el obispo permanece encerrado junto a cinco religiosos más, y seis laicos, informan medios de comunicación nicaragüenses.

Los elementos policiales llegaron hasta la propia catedral donde está destacado Álvarez para capturarlo.

El gobierno de Ortega continúa violando la libertad de expresión al cerrar un medio de comunicación, en este caso a Radio Hermanos, de la diócesis de Matagalpa.

Paralelo a este cierre, otras radio católicas están siendo acosadas, les han solicitado su documentación vigente para su funcionamiento, entre ellas a Radio Católica de Sébaco, Radio San José de Matiguás y Radio Monte Carmelo de Río Blanco, esta situación contra la libertad de expresión, es algo que solo en este país centroamericano se ha registrado.