De acuerdo con el director de Centros Penales, Osiris Luna, los recintos penales han dejado de ser el centro de operaciones del crimen organizado, en la actualidad se implementa un plan que busca la autosostenibilidad de las cárceles.

“Se acabaron las escuelas del crimen hoy impera el orden, control y disciplina” aseguró el titular de centros penales a través de redes sociales, además añadió que el objetivo primordial del plan de autosostenibilidad es que los privados de libertad realmente trabajen.

La idea trascendental es alejar de la ociosidad a la población penitenciaria y contrario a ello involucrarlos en actividades productivas que serán de beneficio para ellos mismos y que pueden contribuir a la inserción social de los individuos una vez saldada su deuda con la sociedad; de forma tal, que se han creado diferentes proyectos encaminados a la producción de alimentos para el consumo interno de dichos centros.

Está iniciativa ya está dando resultados, por ejemplo, en Zacatecoluca se han elaborado diez casas mallas que funcionan como invernaderos, donde reos en fase de confianza pueden cultivar hortalizas, así mismo, se han elaborado granjas para la crianza de pollos y conejos que busca cubrir las necesidades de consumo de proteínas de fuente animal, el proyecto busca, además, reducir costos los costos alimenticios en que incurre el Estado para alimentar a los privados de libertad.

Las mejoras en los Centros Penales también han incluido el bloqueo de señal telefónica, para impedir que desde estos lugares se giren ordenes criminales, dentro de esa misma lógica se ha implementado un mayor control en los recintos, las mismas buscan impedir que haya una comunicación entre internos y criminales en el exterior, de esta manera, el gobierno busca cambiar las condiciones que imperaban en las cárceles y causaban terror y zozobra entre la población.