En un clásico madrugón, las fracciones mayoritarias de la Asamblea Legislativa ARENA y FMLN adjudicaron la presidencia de la Corte de Cuentas al magistrado Roberto Anzora, el mismo que hace unos días filtró información confidencial con fines políticos al diputado Rodolfo Parker.

Se especula mucho sobre la honorabilidad y la incorruptibilidad del magistrado, ya que ha dado muestras claras de obedecer a intereses de personajes oscuros que buscan deslegitimar las iniciativas del gobierno, Anzora brindó detalles de una auditoría para que dicha información fuera utilizada en contra de Pablo Anliker cuando los ministros de Hacienda, Salud y Agricultura explicaban el destino de los fondos del préstamo del BID el pasado 11 de agosto.

El diputado Parker utilizó la información de la auditoría (aún en curso) con fines políticos, puesto que a partir de ello se cuestionó sobremanera al ministro de Agricultura, la oposición mantiene una ofensiva constante en contra del partido oficial, de forma tal que el sabotaje y la manipulación de información componen la principal estrategia para el desprestigio de la gestión. El mismo presidente del parlamento se refirió a la aversión visceral que siente el diputado Parker hacia el Ejecutivo, “A Parker se le ve el hígado por encima de todo”, manifestó Ponce el día en cuestión.

Por supuesto que en una sana democracia debe existir conflicto entre fuerzas políticas, el mismo origen ideológico de las diferentes tendencias así lo dictamina, sin embargo, es agravante que se haga uso del tráfico influencias para manipular información que, en lugar de abonar a un plan de país, dilate importantes decisiones que deberían tomarse de forma conjunta, está claro que el madrugón está encaminado a garantizar que se siga poniendo piedras de tropiezo al Órgano Ejecutivo aunque las fracciones mayoritarias ya no ocupen los curules del parlamento en el próximo periodo, queda por visto a qué intereses obedecerá el nuevo presidente de la Corte de Cuentas.