El director general de la Organización Mundial de la Salud, Doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus, confirmó que las instalaciones del hospital Al-Shifa en Gaza está destruido, «Es un cascarón vacío con tumbas humanas después del último asedio» del ejército israelí.

De acuerdo con el funcionario, un equipo de la institución y sus socios verificaron las condiciones del nosocomio, el cual era considerado como la columna vertebral del sistema de salud de Gaza.

Ante el daño a la infraestructura sanitaria, la WHO considera inviable la funcionalidad del hospital en corto plazo.

«La mayoría de los edificios del complejo hospitalario están completamente destruidos y la mayoría de los activos dañados o reducidos a cenizas. Incluso restaurar una funcionalidad mínima a corto plazo parece inverosímil», manifestó.

La entidad mundial está preocupada por la situación sanitaria de las víctimas del conflicto, esto por el acercamiento de la hambruna y brotes de enfermedades, por la falta de ayuda humanitaria.