El Fmln ya ha demostrado que quiere gobernar nuevamente el país sin importar a quienes se lleve en su paso. Esta vez, está buscando valerse de los salvadoreños en el exterior para conseguir sus objetivos.
El pasado sábado, Manuel «El Chino» Flores presentó su candidatura presidencial junto a Werner Marroquín como vicepresidente, por el partido Fmln.
¿Pero qué hay detrás de esta fórmula?
Esta mañana, el mismo Chino Flores aseguró que Marroquín forma parte de su equipo porque es de la diáspora.
«Nosotros buscamos a alguien de la diáspora, Werner, él es estadounidense. Otro partido no va a presentar una fórmula con la diáspora», aseguró Flores.
Origen de la diáspora
Sin embargo, algo que no reconoció el efemelenista es que la mayoría de salvadoreños que ahora radica en el exterior huyeron del país por la política contrainsurgente de tierra arrasada que llevo a cabo durante la guerra civil (1981-1992) que ellos mismo ocasionaron junto con Arena.
Y otro tanto son refugiados de la violencia de las pandillas y la miseria económica, factores a los que favorecieron por 30 años los gobiernos del Fmln y Arena.
Y a todo eso se le suma que la participación de Marroquín no se inicia con pie derecho, ya que el expresidente salvadoreño y prófugo de la justicia, Mauricio Funes, le acusó de robar fondos de la diáspora durante su anterior candidatura presidencial.
Por lo tanto, con esto, solo se demuestra las máscaras que los partidos de oposición utilizan con tal de obtener el poder para seguirse beneficiándose.
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