Las extorsiones en El Salvador han experimentado una sustancial disminución en lo que va del 2,020, gracias al Plan Control Territorial.

En lo que va del año se han contabilizado 787 casos de extorsión, un número muy inferior a los 1,515 registrados en el mismo período del año 2019. Esto representa 728 casos menos, lo que equivale a un 48.1% de reducción.

Aparte de las extorsiones, el Plan Control Territorial también ha logrado bajar de forma significativa otros crímenes como los homicidios, feminicidios, robos de contrabando y desapariciones.

La baja en los índices delincuenciales es fruto del trabajo articulado del Gobierno del Presidente Nayib Bukele, a través de la Policía y la Fuerza Armada.

Ante las acusaciones sin fundamento de la oposición, que pretende desacreditar los logros alcanzados por el Ejecutivo en lo que respecta a seguridad, las autoridades del Gabinete de Justicia y Seguridad han negado rotundamente que
exista algún tipo de trato con los grupos terroristas para disminuir los índices de
criminalidad.

Para la puesta en marcha de las tres fases de la estrategia de seguridad se necesita una inversión de $575.2 millones, de los cuales $200 millones serían financiados por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), los cuales se dividen en dos créditos: uno por un monto de $91 millones para la fase II, llamada “Oportunidad”, y otro por la suma de $109 millones para la fase III, denominada “Modernización”.