Indignación popular contra diputados de oposición el 9 de febrero de 2020.

Los diputados de oposición en la comisión política de la Asamblea Legislativa se despidieron de su cuestionada gestión 2018-2021, con la declaratoria del 9 de febrero de 2020 como “Día del Golpe de Estado Fallido 9F Nunca Más”, un evento que la Fiscalía General de la República (FGR) confirmó que nunca ocurrió.

La FGR recibió testimonios de diputados que nunca confirmaron que se haya intentado un golpe de Estado encabezado por el Presidente. “Hoy por hoy es muy aventurado hablar del cometimiento de un delito en específico”, dijo el fiscal Raúl Melara al respecto.

Más bien, en esa fecha, motivados por la indignación popular, miles de ciudadanos llegaron hasta las puertas de la Asamblea Legislativa a exigir a los parlamentarios la aprobación de un crédito por $109 millones destinados al Plan Control Territorial.

Los diputados hicieron caso omiso a la convocatoria del Consejo de Ministros del Gobierno del Presidente Nayib Bukele, que previamente había llamado a plenaria, como establece la Constitución de la República, para que se discutiera el crédito para reforzar el exitoso plan que ha dado importantes frutos en el combate a la violencia, a pesar del bloqueo permanente a su financiamiento de los legisladores de oposición.

Sí hubo un intento de golpe de Estado contra el Presidente, pero el 9 de febrero pasado, cuando el diputado arenero, Ricardo Velásquez Parker, pidió la destitución del mandatario a través de una pieza de correspondencia. Diputados de ARENA, Rodolfo Parker y del FMLN acompañaron la intentona golpista de la que luego desistieron por la indignación popular.

Entre el grupo de diputados que levantaron la mano para declarar esa fecha como día del golpe de Estado estuvieron el pedecista Rodolfo Parker, señalado de encubrimiento en la investigación contra la cúpula militar acusada de planificar el asesinato de los padres jesuitas el 16 de noviembre de 1989; el diputado de Arena, Carlos Reyes, quien triplicó su patrimonio de $570,306.91 en 1997 hasta $1,683,453.25 en mayo de 2018.

También levantaron la mano los efemelenistas Jorge Schafik Hándal y Nidia Díaz, participantes en el conflicto armado, y el arenero Mauricio Ernesto Vargas, militar integrante de La Tandona, la promoción militar que manejó la guerra civil, y quien ha sido señalado de permitir la violación de derechos humanos de parte de la tropa a su mando, cuando dirigió el destacamento militar Número 4 de San Francisco Gotera, Morazán (1984).

Tanto Parker como Vargas y los dos diputados efemelenistas quedaron fuera de la próxima Asamblea Legislativa tras salir derrotados en las elecciones del pasado 28 de febrero, donde los partidos que estos representan fueron derrotados contundentemente en las urnas.