Cinco meses después de que la pandemia Covid-19 llegara al país, los diputados de ARENA proponen discutir una ley para el uso obligatorio de la mascarilla y aplicación de protocolos de bioseguridad, luego que en marzo dijeran que era “una gripita”, y de acusar al Presidente de la República de ser “exagerado y alarmista”.
La urgencia de los diputados ante la crueldad de la enfemedad, la comienzan a entender, cuando el país ya contabiliza 408 fallecidos, 15,876 casos sospechosos y 15,035 casos confirmados. Y cuando en el mundo las cifras son alarmantes, incluso en los países desarrollados.
Los mismos alcaldes de ARENA y FMLN están buscando la forma de hacer frente a la pandemia, con métodos focalizados fallidos, ante la falta de una cuarentena estricta a la que la Asamblea Legislativa se ha opuesto férreamente por obedecer lineamientos de algunos empresarios en beneficio de sus negocios.
Incluso, los diputados han retrasado la aprobación y ratificación de préstamos para el combate del virus, compras de equipos de bioseguridad y pruebas; de igual forma, dieron largas al fideicomiso con el que se busca aliviar a las micro, pequeñas, medianas y grandes empresas para su recuperación económica.
Es más, la Asamblea Legislativa se apresura a realizar la plenaria el miércolesd próximo, y no el jueves como de costumbre, para quedar en “vacaciones agostinas”, dejando una deuda ante la población que incluye la aprobación de una cuarentena estricta, como el Ejecutivo lo ha solicitado reiteradamente.