Un turista ingresó a la Basílica de San Pedro, en el Vaticano desnudo, con una frase escrita en la espalda, relacionado a la situación que viven los niños ucranianos con el conflicto con Rusia.

Este hombre se colocó justo debajo del «Baldaquino de San Pedro», esto ocurrió previo al cierre del templo católico y fue grabado con teléfonos celulares por los asistentes que aún se encontraban en la basílica.

El hombre fue retenido por guardia de la localidad, fue obligado a vestirse y presentaba micro heridas que el mismo se infligió con sus propias uñas.
Las autoridades iniciaron con la investigación del hecho para deducir responsabilidades.