La actividad cultural, comercial y de entretenimiento se ha extendido en San Salvador. Incluso en medianoche el tráfico se vuelve pesado en zonas cercanas a centros comerciales y en los bulevares se forman las filas de vehículos como si fuera de día.

Las noches de diciembre en San Salvador son mucho más activas en esta nueva etapa de paz. La actividad comercial está a todo lo que da, con centros comerciales que extienden los horarios nocturnos para dar chance a los visitantes a que hagan sus compras de la temporada.

Incluso en medianoche el ambiente luce dinámico, las personas parecen no preocuparles llegar tarde a su casa, caminan en las aceras con sus dispositivos electrónicos en la mano, en los bulevares, todavía a esa hora, se forman las filas de vehículos como si fuera de día.

Los salvadoreños viven una hermosa y plena paz y así se respira en el ambiente. El viernes en la noche la zona del bulevar los Próceres estuvo amena.

La gente se apresuraba por las calles de un lado a otro, mientras los carros, en fila, sonaban sus bocinas para agilizar el paso, y a lo lejos se escuchaba la música alegre de Marco Antonio Solís que deleitó a los salvadoreños con un concierto desde el estadio Cuscatlán.

A unas pocas cuadras, otro evento organizado para el disfrute de los salvadoreños, en el casco urbano del municipio de Antiguo Cuscatlán, estaba a reventar. Varias orquestas y grupos musicales ofrecieron conciertos gratis en la calle.

La noche del viernes y madrugada del sábado se convirtió en una maravillosa travesía para liberar el estrés de todos los días, hubo opciones de las más variadas para compartir.

Las noches de diciembre en San Salvador son movidas, han cambiado para bien, se ve en el rostro y la actitud de las personas, ya no les preocupa la criminalidad, porque los delincuentes están sometidos.