El politólogo Óscar Peñate destacó este martes que, tanto el Plan Control Territorial como el régimen de excepción son los mejores mecanismos de defensa para la protección de los derechos humanos de la población salvadoreña.
Además, afirmó que los sectores que critican esta medida, implementada por el presidente Nayib Bukele, lo hacen porque tienen el deseo de volver a la situación del pasado, cuando El Salvador era catalogado como el país m+as peligroso del mundo.
«Los organismos de derechos humanos que critican el régimen de excepción son activistas políticos, la mayoría son militantes y exfuncionarios del FMLN, ellos tienen toda una campaña a nivel internacional que ya ha perdido peso», afirmó Peñate.
Asimismo, reiteró que la herramienta no solo es legal sino que ha logrado otorgar operatividad a la Policía Nacional Civil y a la Fuerza Armada.
«Se habían estado respetando los derechos humanos de los victimarios, no los de las víctimas. Eran millones de salvadoreños que vivían extorsionados, vivían con miedo y sus hijos no podían salir a las calles», afirmó el sociólogo René Martínez.
Por su parte, Martínez aseguró que se hubieran necesitado 120 años para combatir la delincuencia de seguir los mecanismos que traían los gobiernos de Arena y Fmln, ya que no eran efectivos y propiciaban la impunidad.
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