El Salvador está siendo reconocido a nivel mundial por su lucha contra la violencia generada por las pandillas que dejaron luto y dolor a las familias honradas de este país centroamericano.

Desde que inició la gestión, el presidente Nayib Bukele trabajó para reducir los índices de homicidios con medidas de seguridad, entre ellas el Plan Control Territorial. 

En 2019, la tasa diaria de homicidio era de 6.6, es decir, 36 asesinatos cada 100,00 habitantes, ese año se registraron 2,398 muertes violentas.

Para el siguiente año, 2020; la cifra comenzó a disminuir considerablemente, 1,341 homicidios; 3.7 su tasa diaria; 20 asesinatos por cada 100,000 habitantes, era evidente que las medidas estaban dando resultados.

Mientras, que el 2021, la tasa diaria de homicidios fue 3.1; que equivalía a 1,147 muertes generadas por las pandillas.

En el 2022, con la implementación del régimen de excepción, los homicidios cayeron drásticamente, solo se registró 495 asesinatos, 1.4 diarios, con una tasa de 7.8 por cada 100,000 habitantes.

Y en lo que va de este año, de enero al 16 de septiembre, las autoridades del gobierno salvadoreño reportan 103 asesinatos, 0.40 diarios y con una estimación de 2.3 por cada 100,000 habitantes.