El Presidente Nayib Bukele refutó categóricamente los alegatos del discurso opositor fallido. Los mismos que meses atrás, al no tener argumentos para negar el éxito del Plan Control Territorial, querían hacer ver al mandatario como violador de derechos humanos por la dureza con que el Gobierno regía las cárceles nacionales, ahora aducen que pacta con las pandillas.
«Era lógico: aún más importante que defender a Silva, ellos saben que viene una debacle electoral sin precedentes, para sus financistas. Así que, durante meses, trataron de golpear por todos lados y no funcionó: Dictador, autócrata, violador de derechos humanos, etc. Sigue…», sentenció Bukele en su cuenta de Twitter.
Además dijo: «atacaron, denunciaron, pusieron demandas, consiguieron apoyos de ONG’s internacionales, de sus amigos Vivanco y “Human Rights Watch”, hasta de un par de políticos de oposición en Estados Unidos. La pintura era: en El Salvador no se respetan los derechos humanos. Sigue…».
También indicó: «lograron incluso condenas internacionales, tanto por nuestro trato riguroso en las cárceles, como por nuestra autorización de usar la fuerza letal (en defensa de propia o de la vida de los salvadoreños). Sigue…»
Del mismo modo expuso: «pensaron que eso nos afectaría aquí. Pero calcularon mal. El pueblo salvadoreño está feliz, que después de una guerra civil y 30 años más de delincuencia, pueden vivir en un país muchísimo más seguro, que el de antes. Las condenas de Vivanco, los tienen sin cuidado».
Posteriormente argumentó: «así que decidieron cambiar de estrategia. “Ahora, el Gobierno no es malo con los terroristas, sino bueno”. Así que inventaron su novela: ¡hay una tregua! Pero olvidaron algunos detalles… Sigue… «
Igualmente sostuvo: «1. ¿Dónde hay una tan sola prueba de algún privilegio? 2. ¿Por qué en los penales hay orden, limpieza, 0 comunicación con el exterior, requisas, y múltiples castigos? 3. ¿Dónde están las prostitutas, fiestas, drogas, Playstations, internet, celulares, que habían antes? Sigue…».
De igual manera alegó: «4. ¿Por qué hay múltiples enfrentamientos en las calles, donde terroristas son heridos de muerte por nuestras fuerzas de seguridad? 5. ¿Por qué no hay videos, fotos, audios, investigaciones formales, juicios, requerimientos fiscales, ni nada, de la supuesta tregua? Sigue…»
Adicionalmente cuestionó: «6. ¿Por qué hay preocupación de la CIDH, por que estamos haciendo lo contrario a una tregua?».
De igual forma señaló: «7. ¿Por qué la relatora de la ONU se mostró preocupada, por la dureza de las cárceles en El Salvador (apenas en mayo)? “Constituir tratos crueles, inhumanos o degradantes y exacerbar aún más las condiciones de higiene ya muy precarias”. https://elsalvador.un.org/es/44617-relatora-agnes-callamard-expresa-su-preocupacion-por-situacion-en-los-centros-penales…Sigue…».
Además se refirió a El Faro: «8. El mismo El Faro, no tuvo el cuidado de borrar el sin fin de artículos atacando al Gobierno, por su dureza reiterada contra los terroristas, en el mismo tiempo que ahora dicen que estaban investigando una tregua. ¿Eran falsos esos artículos? https://elfaro.net/es/201802/el_salvador/21444/ONU-medidas-extraordinarias-son-ilegales-y-buscan-la-%E2%80%9Cdeshumanizaci%C3%B3n-de-los-reos%E2%80%9D.htm… Sigue…».
También manifestó: «9. Y no esperaron una respuesta contundente del Gobierno. Estaban acostumbrados a Gobiernos con la cola pateada, con tratos con terroristas, que negociaron la sangre de los salvadoreños a cambio de votos, que les entregaron armas, dinero, el control de las cárceles. Sigue…».
A este respecto recalcó: «todo esto, documentado en requerimientos fiscales, procesos judiciales reales, videos de políticos entregando dinero, audios de funcionarios ofreciendo armas y cientos de millones de dólares, videos de fiestas porno en centros penales, etc. https://youtu.be/qRikI0MqDTc Sigue…».
«10. ¿Qué tienen ahora, más que la contradicción más grande en la historia del panfletarismo salvadoreño? Una contradicción que es inaceptable, para cualquier persona con dos dedos de frente. Una “tregua” sin ninguna prueba. Y un Plan Control Territorial, documentado de sobra», concluyó.