El control en el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT) es rígido desde su creación. A dos años de funcionamiento, las medidas producen un efecto positivo en términos de seguridad.

En un lugar donde guardan prisión los homeboy, palabreros, corredores de clicas, corredores de programas y sillas, las medidas siempre son de absoluta restricción y se mantienen hoy en día.

Las autoridades reafirman esa condición y mantienen un control en esta megacárcel.

El CECOT tiene un muro de concreto de 11 metros de altura y 2.1 kilómetros de extensión, no hay señal telefónica y tiene una sola carretera de entrada.

 

Dentro de la cárcel a los reclusos están sometidos a las órdenes de las autoridades. El centro cuenta también con celdas de castigo, oscuras y sin nada en su interior.

“Ahí pagarán por los crímenes cometidos contra nuestro pueblo; incomunicados con el exterior, sin posibilidad de salir, ni de ordenar crímenes desde la cárcel”, afirmó el Presidente Nayib Bukele cuando los pandilleros fueron trasladados tras ser capturados bajo el Plan Control Territorial y el régimen de excepción.

Los reos solo tienen contacto con los custodios, en un claro contraste con el pasado reciente y en las administraciones anteriores, donde los reos hacían de las suyas, introducían teléfonos celulares, drogas, realizaban shows y gozaban de muchos privilegios.

“Los reos se encaraman a las literas de cuatro alturas en las que duermen, sin colchón ni sábana, contra el puro metal; en las que comen arroz y frijoles, un huevo duro y pasta, usando solo  las manos. “Cualquier utensilio puede ser un arma mortal”, dijo el director del CECOT, Belarmino García.

La mega cárcel también ha sido visitada por congresistas estadounidenses para cerciorarse de las condiciones de seguridad y control y confirmar su éxito en el control del crimen.

“Hay mucha más disciplina en esta cárcel de lo que vemos en muchas cárceles de los Estados Unidos. Estas personas han asesinado a muchos y en Estados Unidos las cárceles albergan a todo tipo de personas que han cometido diferentes delitos, pero aquí se hace un esfuerzo dedicado para resolver un problema terrible que tenía el pueblo salvadoreño”, aseguró el congresista Matt Gaetz a mediados de 2024.

Acostumbrados a tipificar en el pasado a las cárceles como medios que servían para organizar el crimen, el CECOT dista mucho de ese concepto.

“Dentro del ‘Alcatraz’ de Bukele: ‘Es imposible escapar. Estos psicópatas van a pasar la vida entera entre estas rejas’’’, cita un titular del periódico español, El País.

Los mareros permanecen encerrados veintitrés horas y media. Los treinta minutos restantes los llevan encadenados al centro del pasillo para realizar ejercicios de estiramiento. Una vez que ingresan a ese sistema, no pisan el exterior ni reciben visitas.

Todas las restricciones hacen que la mega cárcel sirva de modelos para otros países cuya criminalidad preocupa a sus habitantes. Dentro de estas naciones se encuentra Argentina, Ecuador, entre otras, que piensan implementar esta estrategia para el combate de las bandas de criminales que acechan a muchos países de la región.