Esta noche, el Estadio Cuscatlán fue escenario de una tragedia que ha dejado una profunda conmoción en el fútbol salvadoreño. El Director de Protección Civil, Luis Alonso Amaya, ha confirmado que alrededor de 500 personas han recibido atención médica tras el incidente, convirtiéndose en una noche oscura y llena de dolor para los aficionados y para todo el país.

La estampida ocurrió en el transcurso de un partido de fútbol entre FAS y Alianza, generando caos y pánico entre los asistentes. Según el Director de Protección Civil, las personas atendidas presentaban desde crisis nerviosas hasta heridas graves, y lamentablemente, se reportan varias víctimas fatales, lo que ha sumido a la nación en luto y tristeza.

Las autoridades continuarán trabajando arduamente para esclarecer los hechos, garantizar justicia y tomar las medidas necesarias para evitar que tragedias como esta se repitan. Mientras tanto, los corazones de todo el país están con las víctimas y sus familias, en una noche que quedará marcada en la historia del fútbol salvadoreño como una de las más tristes y oscuras que se hayan vivido.