La reciente iniciativa del Presidente Nayib Bukele de financiar el presupuesto nacional con ingresos propios a partir de 2025 ha generado un notable optimismo en el ámbito empresarial salvadoreño. Esta medida ha reforzado la confianza de los inversores y promete traer ventajas significativas para las empresas locales.
Carlos Chávez, vicepresidente de CAMARASAL, afirmó que las estrategias del Gobierno serán favorables tanto para los inversionistas como para el sector industrial del país. Con más del 80 % del empleo en El Salvador dependiente de las inversiones y actividades empresariales, estos cambios son especialmente significativos.
La positiva respuesta de los mercados internacionales, que se ha traducido en el aumento de los bonos salvadoreños y la reducción del riesgo, abrirá nuevas posibilidades de financiamiento para el sector privado. Según Chávez, la baja en los costos financieros, impulsada por la mejora en la percepción internacional, beneficiará directamente a la economía local y al entorno empresarial.