Tras 10 años de gobiernos corruptos y aliarse con ARENA para bloquear los planes del Ejecutivo en beneficio del país, los salvadoreños le han dado su voto de castigo. Ahora el partido de izquierda está a punto de desaparecer.

De acuerdo con la presidenta del Banco Hipotecario Celina Padilla, «los gobiernos del FMLN utilizaron al Banco Hipotecario para mover dinero de las cuentas de Presidencia de forma irregular. En el gobierno de Funes (actualmente prófugo y naturalizado nicaragüense) movilizaron $379.5 millones, mientras que en el gobierno de Sánchez Cerén movilizaron $58.7 millones».

Asimismo, la Fiscalía General de la República asegura que la estructura de corrupción dirigida por el expresidente de la Asamblea Legislativa y diputado del FMLN, Sigfrido Reyes (ahora fugitivo y asilado en México) movió más de $6 millones, entre negocios turbios, la compra de terrenos al IPSFA y viáticos de viajes efectuados durante su administración, primero como diputado y luego como presidente de la Asamblea Legislativa.

Por si eso fuera poco, los rojos se unieron al partido ARENA y Rodolfo Parker, para boicotear las iniciativas de la Presidencia de la República para sacar adelante a El Salvador; traicionando sus ideales históricos.