Rodri Hernández se queda con la presea del mejor jugador del planeta en una ceremonia de mucha polémica, donde no estuvo el Real Madrid.

Rodrigo Hernández es el nuevo Balón de Oro. Se lleva el prestigioso premio en medio de una alta polémica cuanto los focos apuntaban a Vinicius. El propio Real Madrid se arrepintió de asistir a la ceremonia de entrega sin importar de haber sido nombrado como el mejor equipo del mundo con el mejor entrenador del planeta.

Rodri, no es que sea mal jugador, de hecho todo lo que toca es sinónimo de profesionalismo. Le da equilibro a su equipo y lo hecho con La Roja también lo catapultaba como uno de los favoritos.

Pero lo de Vini significa el divorcio del equipo merengue con la entrega del Balón de Oro. Tanto había celebrado el club que hasta Nike se uniría a la celebración.

Los de Ancelotti y Florentino saben que es un duro revés para un equipo acostumbrado a estar en lo más alto, a apoyar al delantero más determinante de la edición de Champions pasada. Lo de Rodrigo es otra historia, es otro español que se agencia la presea, 64 años después que lo gano Luis Suárez.