El pacto entre el primer gobierno del FMLN y grupos delincuenciales permitió la expansión territorial de las pandillas en El Salvador, así lo confirmaron testigos presentados por la Fiscalía General de la República (FGR) en el caso “Tregua” contra el expresidente Mauricio Funes.
Dicho pacto también contribuyó al aumento de extorsiones, desaparición de personas y operaciones de narcoactividad de parte de la pandillas, afirmó José Ricardo Perdomo Linares, exdirector del Organismo de Inteligencia del Estado, OIE, entre el año 2012 y 2013, mismo periodo en el que se desarrolló la tregua entre pandillas.
Asimismo, Linares reiteró que los autodenominados mediadores de la Tregua, Fabio Colindres y Raúl Mijango; así como Roberto Díaz; Antonio Rodríguez Tercero, conocido como padre Toño, y un agente de la Policía de nombre Wilfredo, ingresaban celulares y hasta cargadores a los penales de Ciudad Barrios, Izalco, Gotera, entre otros.
Este miércoles declararon cinco testigos y sumado a los seis del martes se totalizan 11 testigos, se espera que la vista pública en el caso Tregua finalice el viernes.
Además de Funes, quien es procesado como reo ausente, también es enjuiciado el exministro de Defensa David Munguía Payés, quien es señalado de garantizar los beneficios a los pandilleros.
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