El director ejecutivo del Fondo Solidario para la Salud (FOSALUD), Carlos Núñez, en la entrevista de El Blog Live confirmó que en El Salvador se consume un promedio de 570 millones de cigarros al año.

En ese sentido y según datos estadísticos del Ministerio de Salud, los departamentos de San Salvador y La Libertad son los sitios donde más se consume ese tipo de estimulante, cuya nicotina actúa sobre las áreas del cerebro que regulan las sensaciones placenteras, provocando la aparición de dependencia. El cigarro también actúa sobre el sistema cardiovascular aumentando la frecuencia cardiaca y la posibilidad de arritmias.

Según el funcionario, el Ministerio de Salud tiene un gasto anual aproximado de 260 millones de dólares para atender a fumadores, ya sea con consultas médicas, hospitalizaciones y por desperdicios que la gente hace al consumir tabaco.

“Nosotros tenemos que batallar muy fuerte por todo el dinero que el Estado invierte en estos pacientes, sin contar las enormes cantidades de dinero que la gente invierte para comprar cigarrillos”, agregó.

En esa misma línea explicó que, la persona que fuma un cigarro es el equivalente a que pierda un día de su vida, por lo que hay que pensar en aquella persona que fuman hasta 20 cigarros por día, pierde 20 días de su vida en un solo día.

“Nosotros tenemos un dato estadístico de que en El Salvador al año se mueren 1,600 personas por fumar. De ellas identificamos que el 78 por ciento corresponde a personas que fuman y un 22 por ciento son fumadores involuntarios”, concretizó y añadió, que a nivel mundial se mueren 8 millones de personas y que a ello se tiene que sumar 1.5 millones de fumadores pasivos.