Un Real Madrid pletórico aplastó a un disminuido Barcelona en el partido de vuelta 4-0 de la Copa del Rey donde el cuadro blaugrana tenía la ventaja a su favor, pero terminó sucumbiendo ante el mejor juego del equipo merengue

Contrario al primero partido, los madridistas no otorgaron concesiones el equipo local y dominaron el medio equipo con un juego solvente, de mayor equilibro y un ataque veloz comandado por Vinicius Jr.

El encuentro, sobre todo, se fue definiendo en la segunda parte cuando los de Xavi se fueron al ataque y terminaron siendo sorprendidos por la verticalidad de los delanteros madridistas.

Resulta curioso y hasta increíble para muchos analistas deportivos que irremediablemente el Barca se lleve la liga doméstica con sus 12 puntos de ventaja y con un nivel inferior en la Liga de Campeones, y que el equipo blanco continúe en segundo lugar a pesar del mayor bagaje en competencias internacionales.