Promontorios de basura en el Centro Histórico de San Salvador, bulevar Venezuela, comunidad Las Palmas, mercados municipales y otros lugares de la capital es la herencia que deja el alcalde saliente Ernesto Muysondt a su sucesor de Nuevas Ideas, Mario Durán que llega a ocupar la silla edilicias este próximo 1 de mayo.

Una de las quejas de la población capitalina es el desinterés que tuvo el edil de Arena por mantener limpia la ciudad. El tren de aseo dejó de circular justificando que San Salvador necesitaba la contratación de un nuevo servicio de recolección de basura.

La alcaldía no entregó en varias ocasiones combustibles para que los camiones salieran a retirar los desechos sólidos de las calles, dando pie a la necesidad de contratar un servicio extra para dar abasto en la recolección de basura y de paso aumentar el impuesto por ese servicio.

La gestión del alcalde de Arena del periodo de 2018 a 2021 será marcada por la deficiencia en el manejo del tratamiento de los desechos sólidos, que originó en algunas zonas de San Salvador una crisis sanitaria por la acumulación de la basura, como fue el caso de la planta de transferencia Aragón al sur de la ciudad.