El Centro de Confinamiento del Terrorismo es un eslabón clave para la ejecución del Plan Control Territorial y asegurar que los criminales no vuelven a las calles.

Este 31 de enero se cumplirá un año desde que el Presidente Nayib Bukele mostró a la población el Centro de Confinamiento para el Terrorismo (CECOT), uno de los eslabones necesarios en la ejecución del Plan Control Territorial.

El CECOT es una fortaleza que se extiende por 36 manzanas sobre un terreno aislado de zonas pobladas en Tecoluca, departamento de San Vicente. Su capacidad es para 40,000 reclusos. Los dos primeros traslados ocurrieron el 24 de febrero y el 15 de marzo de 2023. Para los reos no hay privilegios, ni favores, ni comunicación con potenciales cómplices: solo acceden a los servicios que tiene su debido proceso.

El Centro de Confinamiento está diseñado para impedir cualquier escape, de manera que ninguno de los criminales regrese a las calles y que, más bien, cumpla con un castigo ejemplar. El sitio tiene siete anillos o filtros de seguridad, 19 torres de vigilancia y un muro de 11 metros de altura que recorre 21 kilómetros. Las autoridades instalaron sensores y utilizaron materiales específicamente para detectar cualquier intento de salir.

Aún con todas estas capas de seguridad, en el CECOT hay 600 soldados de la Fuerza Armada y 250 agentes de la Policía Nacional Civil atentos a los movimientos cercanos o sospechosos, para garantizar que los terroristas se mantengan dentro, viviendo con su condena. El debilitamiento de las estructuras pandilleriles, capturando y encerrando de una vez por todas a los terroristas, es parte de la ejecución del Plan Control Territorial.

Lea más: